martes, 22 de abril de 2008

La mano que mece la cuna

Entre estudios de medios, mensajes, masajes y sus efectos en la opinión pública, los medios y la política en su relación harto compleja y el debate sobre la independencia de la prensa –por esas cosas que tiene la vida, de casualidades, causalidades y demás diatribas–, el domingo pasado, en el norte del continente, se volaron algunos sombreros y se escaparon algunos tiros al aire.

El New York Times sacudió al mundo con un informe (bien largo) que “revela cómo la influencia del Pentágono sobre un numeroso grupo de analistas políticos ayudó a justificar la necesidad de la guerra de Irak e influyó para obtener el respaldo de la opinión pública”, de acuerdo con Norberto Cambiasso (Crítica de la Argentina).

“Behind TV Analysts, Pentagon’s Hidden Hand”, la extensa nota firmada por David Barstow, periodista del Times desde 1999, cuenta hasta hoy (madrugada del martes 22, ya miércoles) con 1409 comentarios en su versión on-line. La noticia fue replicada por las agencias de todos los rincones del planeta.

La investigación duró dos años e hicieron falta 8.000 páginas de documentos del Departamento de Defensa para revelar esta “operación psicológica y mediática a gran escala”.

Según Cambiasso: “Los analistas manipulados por el Pentágono forman un contiengente de 75 ex oficiales de alto rango, un ejército privado de relacionistas públicos reclutado a partir de 2002”.

Estos “expertos” son consultados con frecuencia por las grandes cadenas de noticias (FOX News, CNN, NBC, CBS, y ABC) y algunos de ellos colaboran para el Wall Street Journal y el mismo New York Times.

El diario La Nación también hizo referencia al informe, puntualizando las conclusiones del Times acerca del gobierno de Bush quien "ha utilizado su control del acceso a la información para transformar a los analistas en una especie de caballo de Troya en los medios, un instrumento para moldear la cobertura mediática de la lucha antiterrorista".

Según el diario americano, el Departamento de Defensa ha querido "generar cobertura noticiosa favorable a la gestión del gobierno en tiempos de guerra".

Otro dato de sumo interés, aunque con poco efecto sorpresa, ha sido la información revelada acerca de la mayoría de estos especialistas quienes, casualmente, trabajan para compañías del sector armamentista.


Confidencias

“La denuncia se basa en el análisis de años de informes internos de Defensa, viajes a Irak y al centro de detención de la base naval de Guantánamo registrados en 8000 páginas de correos electrónicos, transcripciones y grabaciones que el diario obtuvo luego de ganarle un juicio al Pentágono”, explicó La Nación.


(el link al informe completo en inglés)

1 comentario:

Sol dijo...

¿Para el pueblo pan y circo o guerra y fútbol? Sospecho que estos son los recursos más utilizados por la mayoría de los gobiernos totalitarios, que siempre -o la mayoría de las veces- logran regular la información que se `publica. La del Golfo y Malvinas son dos ejemplos. Vale recordar la tapa de la Gente "Estamos ganando", a lo que Ricardo Kirschbaum le encontró una explicación: "En ese momento los medios daban a la sociedad lo que pedía, lo que quería escuchar. Cualquier otro discurso que no fuera de victoria, era calificado como derrotista y poco patriota".